Resumen
Se conoce que el ambiente construido modifica las variables climáticas que influyen en el balance energético del cuerpo humano; siendo el confort térmico uno de los factores que interviene en la habitabilidad del espacio. Este estudio analiza la interacción entre micro-clima y morfología urbana para determinar el grado de confort térmico de zonas de baja densidad en una ciudad de clima árido (Mendoza-Argentina). Para ello se seleccionaron, caracterizaron morfológica y forestalmente, y se monitorearon micro-climáticamente siete canales viales urbanos (CVU) representativos insertos en diversas morfologías de tramas. El confort térmico se calculó mediante COMFA, y se cuantificaron las relaciones entre morfología y confort mediante el índice Pearson. Los resultados muestran que el confort térmico en los CVU analizados varía en un rango entre 70 a 20%, manifestando que la combinación entre huella urbana, perfil y forestación determinan en conjunto la habitabilidad térmica. También se observa que para una determinada morfología de trama, los CVU muestran diferentes respuestas en cuanto a confort exterior y enfriamiento nocturno. Esto pone en relevancia cómo impactan las decisiones de diseño y planificación de los esquemas de urbanización al momento de definir que estrategias priorizar con el fin de alcanzar la sustentabilidad del ambiente construido.