Resumen
El aumento alarmante de los asentamientos urbanos precarios ha configurado a Maracaibo como una ciudad eminentemente informal, verdad esta que no es asimilada con facilidad por el sector formal de la ciudad, que se resiste a perder su primacía ante el avance del otro. En este sentido, se busca el mejoramiento de la calidad de vida de los usuarios de estos sectores a través del reconocimiento de sus valores culturales y sus necesidades de espacio comunal y familiar. Dicha búsqueda contempla también la formación de organizaciones autónomas que permanezcan y actúen más allá del proceso de autoconstrucción y renovación del hábitat, creándose comunidades autogestionarias y autónomas que se orienten a la búsqueda de recursos para el logro de los proyectos de desarrollo y mejoramiento de su entorno. Por ello, es fundamental la participación y organización de las comunidades para la defensa y mejoramiento de nuestros asentamientos urbanos precarios, porque permite garantizar la calidad urbana en beneficio de todos, con el fin de lograr impactar en forma positiva, en las políticas urbanas y de fortalecer la participación y apropiación de los programas por parte de las comunidades como una forma de avanzar en la búsqueda de una sociedad equitativa, responsable y solidaria con el derecho a la vivienda y a un entorno apropiado.