Resumen
Actualmente en los centros históricos de las ciudades mexicanas convergen tendencias modernizantes expresadas en su forma física, actividades comerciales y tensiones sociales. El artículo analiza el anclaje de la renovación urbana en el centro histórico de la ciudad de Toluca, a través del conjunto Paseo Molino, el cual marca un hito en la producción de vivienda vertical, comercios y servicios en un sector que desconoce antecedentes semejantes. Por medio de entrevistas semiestructuradas y recorridos exploratorios, se caracteriza el entorno urbano del proyecto, los agentes y mecanismos de la apropiación del suelo urbano y la prospectiva de los impactos esperados. El anclaje urbano expresa niveles de intervención y grados de decisión pública y privada que configuran un modo distinto de gestión urbana a través de la intensificación del uso urbano y mecanismos que instituyen el fideicomiso para garantizar la rentabilidad. Se concluye en la importancia del reacomodo de las relaciones gobierno y sector privado para enfrentar la continuidad del pasado que se remonta a casi dos siglos, y que en lo sucesivo constituirá un factor que podría frenar la multiplicación de modernas intervenciones urbanísticas en el centro histórico de la ciudad de Toluca.