Resumen
Hoy, puede decirse que el desarrollo económico y social no es terreno propicio para las ideologías cerradas. En efecto, las formulaciones de carácter ideológico necesitan ámbitos receptivos y homogéneos sobre los que asentarse, porque sólo perentorias y graves necesidades sufridas por amplias capas de ciudadanos contribuyen a dar una explicación de la asunción social de saberes políticos de salvación, como son las ideologías.