Resumen
Este artículo traza una analogía entre el agregador, un formato digital basado en la recopilación dinámica y sintetizada de contenidos externos, y tres obras de la oficina francesa BRUTHER: un proyecto teórico de 2018 publicado en la revista Cartha, su manifiesto en 99 notas y el Centro de Investigación de Nueva Generación en Caen. La analogía se construye en base a los planteamientos del crítico de arte David Joselit, para quien el agregador es un formato que, debido a su ubicuidad en la ecología mediática contemporánea, traslada sus lógicas a muchos otros ámbitos, incluidos el del arte y la creación. Dichas lógicas promueven la congregación de entidades singulares y diferenciadas en una superficie y espacio común, algo que resulta en formas que no presentan jerarquías definidas ni persiguen la síntesis ni la finitud, sino la movilización de aproximaciones múltiples e individualizadas. Tal y como se refleja en el manifiesto de la oficina gala, el trabajo de BRUTHER se asienta igualmente en la congregación de referencias materiales e imaginarias singulares y diferenciadas, cuyo encuentro persigue la movilización de nuevas ideas y motivaciones proyectuales. El proyecto publicado en Cartha y el Centro de Investigación se presentan aquí como dos productos derivados de esta lógica: arquitecturas generadas a partir de la recopilación de materiales de procedencia diversa y de nivelada importancia que, en su coexistencia, alimentan la generación de curiosidades, intuiciones y escenarios espaciales.This article draws an analogy between the aggregator, a digital format based on the dynamic collection of external contents, and three works by the French office BRUTHER: a theoretical project of 2018 published in the Cartha journal, its manifesto in 99 notes and the New Generation Research Center in Caen. The analogy is based on the proposals set by art critic David Joselit, for whom the aggregator is a format which, due to its omnipresence in the contemporary media ecology, transfers its logic to many other spheres, including art and creation. These logics promote the gathering of differentiated entities in a common space and surface, something which results in forms that do not exhibit defined hierarchies nor completion, but foster multiple and individualized approaches. As reflected in the manifesto of the French office, BRUTHER?s work is also established on the gathering of unique, differentiated material and imaginary references, the meeting of which seeks to mobilize new ideas and design intuitions. The works published in Cartha and the Research Center are presented here as two products stemming from this logic: architectures generated from the collection of materials of diverse origin and of level importance that, in their coexistence, feed the generation of curiosities, intuitions and spatial scenarios.