Resumen
El proceso de restauración del interior de la iglesia de la Colonia Güell, iniciado en octubre de 2002, no ha hecho más que comenzar. De los muchos problemas por resolver -reflejo del estado de provisionalidad que ha caracterizado al conjunto durante años-, algunos son fruto de la falta de atención al deterioro o al paso del tiempo; otros son consecuencia de no haber podido acabar Gaudí la obra por él concebida: de no haber hecho nadie lo que no pudo hacer Gaudí, aun siendo esencial para definir su obra (como ocurre con los acabados constructivos no resueltos, que desnaturalizan la obra del arquitecto), o bien de los desaciertos de quienes se vieron obligados a dar respuestas imprescindibles tras su marcha (destacan, entre estos, el voluminoso cancel y los cerramientos bajos del espacio que debía acoger la escalera de caracol de acceso al piso superior y al campanario, o el presbiterio, con una clara problemática de carácter formal y litúrgico). En el artículo se presenta el proyecto de reforma interior y las reflexiones y análisis que le precedieron -proyecto que parte de la preeminencia del uso cultual del edificio y la exigencia ineludible del respeto por sus valores monumentales-, y se explica lo que se ha hecho y lo que está previsto hacer.