Resumen
El control en el intercambio de flujos energéticos interior-exterior y la inercia térmica de los materiales constructivos son características claves de la envolvente de los edificios de bodegas. Esta situación es particularmente importante en el caso de los edificios construidos sobresuelo en climas con temperaturas diarias y estacionales muy variables. En el caso de que la arquitectura no provea la respuesta adecuada, indefectiblemente se recurre al consumo de energía auxiliar. La bodega S.A., ubicada en Mendoza, Argentina, consume energía auxiliar equivalente a 2.500 kW por año. Dicha bodega sobresuelo presenta dos tipos de envolvente vertical: una tradicional en adobe (? = 0.81W/mK) y otra contemporánea en chapa galvanizada sin aislación (? = 45 W/mK). El objetivo de este trabajo es analizar los aspectos de materialidad, inercia térmica e intercambio de flujos energéticos de envolventes tradicionales y contemporáneas y, comparar los resultados obtenidos con un caso teórico de bodega subterránea. Entre los resultados obtenidos se observa que la envolvente tradicional mantiene las temperaturas interiores entre 8,5 ºC y 10 ºC por debajo de las temperaturas exteriores, mientras que los nuevos espacios con envolventes contemporáneas lo hacen solamente 3 ºC a 5 ºC por debajo de las temperaturas exteriores. En el caso de una bodega subterránea, las temperaturas estarían estables durante el año en 16,5 ºC; esto es, en verano, 20 ºC por debajo de las temperaturas exteriores.