Resumen
En el año 1957, Emilio Duhart Harosteguy recibe el encargo de planificar el crecimiento físico de la Universidad de Concepción para los siguientes 25 años. Lo que en un principio sería el desarrollo de un Plan Director del conjunto universitario, se transformó en una elaborada planificación urbano-arquitectónica, desde que al requerimiento se incorpora también la redacción de los proyectos de arquitectura. Aquello supone una doble oportunidad para Duhart: la de dotar de una estructura coherente a la totalidad de la organización urbana de la ciudad universitaria y la de dar forma al espacio público del conjunto mediante la precisa configuración definida por la nueva arquitectura. Este escrito intenta develar los criterios de proyecto convocados por el arquitecto para la conformación de la Plaza del Foro Abierto, espacio público que puede ser considerado como la síntesis de los argumentos elaborados por Duhart para la planificación general. Dicha plaza, que el mismo arquitecto señalaba como el centro de gravedad o corazón de la universidad, se ha transformado, a sesenta años de su génesis, en uno de los lugares públicos con mayor sentido de pertenencia e identidad para la ciudad de Concepción; premisa a partir de la cual se desarrolla este artículo.