Resumen
El contexto de consolidación del modelo estatal desarrollista en Argentina, desplegado desde la segunda posguerra, impulsó la industria como vía de mejora económica, mientras la arquitectura se transformó en un actor central en la intención de brindar herramientas válidas para satisfacer distintas necesidades básicas. En materia de salud, los concursos de anteproyectos para hospitales nacionales de fines de la década de 1960 constituyeron un fecundo campo de exploración proyectual y tecnológica, y brindaron una oportunidad para la difusión de la llamada ?arquitectura de sistemas? como alternativa a los métodos vigentes. Este artículo toma como caso de análisis el proyecto ganador para el Hospital San Vicente de Paul en Orán, Salta, identificando en la flexibilidad, la indeterminación y el crecimiento, así como la incorporación de sistemas constructivos industrializados, las herramientas proyectuales específicamente elegidas por sus autores como alternativa para mejorar la calidad de vida de esta población postergada.