Resumen
La publicidad es una parte fundamental de esa intrahistoria tan querida por Unamuno, y nos acompaña en su forma moderna desde hace más de 100 años. En la publicidad se pueden leer los anhelos, las pulsiones, los miedos de una sociedad a lo largo del tiempo. Algo tan importante como conocer la cruda realidad de cada momento cifrándola en números, estadísticas o incluso fotografías. En la publicidad no está el ser, sino el querer ser de cada trozo de la humanidad en cada momento. De tal forma que, juntando todos esos trozos, también tendríamos una idea cabal del estado de desarrollo de cada uno en un momento dado, así como de su evolución. Por eso conservar y documentar la publicidad es tan importante. Cierto es que para la Academia de la Publicidad hay una segunda intención no menos importante, que es reconocer a aquellos que han hecho la publicidad, sus autores individuales y colectivos.