Resumen
El explosivo crecimiento del stock edificado de los últimos años en las ciudades chilenas se ha visto reflejado en concentraciones inmobiliarias de gran altura, que irrumpen estrepitosamente en la morfología de las ciudades chilenas. Externalidades son observadas en los espacios y edificios vecinos tales como extensas áreas de sombreamiento que afectan las condiciones térmicas y lumínicas. Estas construcciones se realizan aparentemente acordes a la norma urbanística, pero afectan la luz solar incidente en fachadas y suelos, disminuyendo las posibilidades de captación y su uso como energía renovable. El objetivo del presente artículo es explorar mediante modelos espaciales ?energéticos, distintas formas de ocupación de suelo, cambiando la altura edificada, pero manteniendo la constructibilidad en cinco ciudades chilenas. Las ciudades seleccionadas se sitúan en el centro sur de Chile, emplazadas tanto en el borde costero como el valle central y han presentado crecimientos inmobiliarios importantes en los últimos años. Los resultados muestran valores de energía más elevados en configuraciones de mayor altura, y menores valores relativos a medida que asciende latitudinalmente. El modelo básico ha sido una manzana de 1 ha como punto de partida, por tanto los resultados no son aplicables a un tejido urbano que es más complejo.