Resumen
Los sistemas de transporte históricamente se han constituido como componentes concentradores y catalizadores de urbanización. En torno a dichas infraestructuras han tendido a localizarse nuevos asentamientos y poblados. Sin embargo, a partir de los procesos que se registran desde las últimas décadas del siglo XX, como el desarrollo de tecnologías, políticas neoliberales y nuevas dinámicas del capital internacional, se producen cambios en la producción geográfica-territorial que aceleran los procesos de urbanización mayormente en torno a las vías de comunicación. El presente trabajo se propone indagar el rol de estas infraestructuras en las dinámicas de dispersión urbana que se registran en las metrópolis contemporáneas, tomando como caso de estudio la Región Metropolitana de Rosario en Argentina (RMR). A través de un análisis crítico-interpretativo del proceso de transformación de la RMR, se realiza un abordaje multiescalar del proceso de dispersión urbana en relación con los sistemas de movilidad. Esta región, especialmente desde fines de la década de 1980, atraviesa numerosos cambios en su estructura interna regional, transformando grandes áreas de suelo rural tanto para nuevos componentes productivos como para usos residenciales. En este contexto, las infraestructuras de movilidad se posicionan como polos atractores de dichos cambios de uso del suelo.