Resumen
Los procesos patológicos comúnmente aparecidos en los cerramientos de fábrica de ladrillo sobre estructuras porticadas, en los últimos años, han hecho replantearse el diseño y la construcción de los cerramientos de fábrica en nuestro país, hasta el punto de verse en la necesidad de idear una nueva tecnología capaz de minimizar la problemática existente.Son muchas las causas que pueden inducir la fisuración de las fábricas de ladrillo, siendo ésta, junto con las humedades, los procesos patológicos más frecuentes que nos podemos encontrar en los cerramientos actuales (Figura A). En todos los casos la fisuración deriva de la rotura a tracción de las fábricas, como consecuencia de la escasa capacidad resistente de la misma frente a estas solicitaciones según ASEMAS.Los cerramientos actuales de ladrillo están apoyados sobrevolando el borde del forjado, y se mantienen frente al viento por el efecto arco en vertical entre forjados consecutivos, lo que conlleva la inevitable acumulación de cargas en el cerramiento.Con la fábrica armada, como primera medida, se puede controlar la fisuración de la albañilería al hacerla más dúctil, pero se necesita disponer juntas horizontales de movimiento bajo los forjados para evitar la acumulación de cargas en los cerramientos, lo que conlleva la inestabilidad de los paños frente al viento.Para evitar tener que disponer pilastras de trasdós donde anclar el paño de fábrica, que interrumpen la cámara de aire y el aislamiento, se ha ideado el Sistema de Albañilería Integral que contempla un conjunto de inventos, referidos a la tipología de las piezas y de los armados, que permiten que el albañil, de forma sencilla, pueda construir placas armadas en las 3 direcciones del espacio, empleando sólo mortero.Las nuevas invenciones han permitido desarrollar nuevas tipologías de fachadas de ladrillo: Apoyadas, Colgadas o Prefabricadas, donde se logra la eficacia higrotérmica del cerramiento, con cámaras de aire continuas, y sin puentes térmicos ni humedades.Esta tecnología se está aplicando desde hace unos años, en numerosas edificaciones de nuestro país, y por sus ventajas, puede aplicarse en cualquier otro lugar, inclusive en zonas sísmicas.