Resumen
Este artículo se propone discutir las condiciones en que dos novelas ?El mal de la taiga de Cristina Rivera Garza y Leñador o las ruinas continentales de Mike Wilson? exploran los procesos de despersonalización a los que se someten sus protagonistas, en una deserción de los límites del sujeto que los proyecta hacia nuevas dimensiones de lo común. El vínculo con los otros, la relación con el entorno y la mutación propician la despersonalización como un progresivo despojamiento de sí. Estas transformaciones narradas se corresponden con experiencias de lectura (y de escritura) que las novelas activan, prácticas que inducen nuevas modalidades de consumo y de des/apropiación de la literatura. En síntesis, en estas obras la exploración diegética de nuevas formas de vida se coordina con experimentaciones formales que tanto potencian experiencias de lectura del ?fuera-de-sí? como subrayan las redes colectivas que respaldan cualquier producción artística.