Resumen
En el contexto del regreso del Estado como financista del despliegue de las telecomunicaciones a gran escala en 2010, el Gobierno de México dio comienzo a un ambicioso programa para extender el acceso a banda ancha de alta calidad en instituciones públicas con recursos federales. El presente artículo describe el programa y analiza, a través de una encuesta de gran escala, el estado del acceso a Internet y de su adopción en los hospitales, las escuelas y las oficinas de los gobiernos locales de México. Los resultados indican que la relación entre los costos que tienen en la actualidad las instituciones públicas analizadas y la calidad de los servicios de banda ancha que reciben es muy ineficiente. Por lo tanto, resulta necesario implementar una política que resuelva esta problemática. Sin embargo, tal política no debería tratar solo el destino de los recursos públicos, sino también una posible negociación con operadores que pueden brindar una amplia conexión y de alta calidad a las instituciones públicas.